Hola a todos y bienvenidos una vez más. Aquí me encuentro de nuevo para traeros las últimas noticias musicales. En esta ocasión vengo para volver a hablaros de un nuevo artista: ¡Pecker! Y bueno, ¡comencemos!
Dos cosas me han traído hasta aquí: la necesidad vital de expresarme a través de la música pop y la poesía, y el impulso de todas esas personas que han creído a ciegas en lo que estaba haciendo. Por segunda vez mi nuevo disco ve la luz mediante una exitosa campaña de crowdfunding. Y no es que no importe el pasado, mis siete anteriores elepés, las colaboraciones o los festivales y salas que he recorrido, es que el presente es lo único que tenemos y en el mío esplenden 9 nuevas exultantes canciones.
Volví a coger la guitarra después de meses justo en aquella pausa desconcertante, en ese momento de encierro imperativo que nos paralizó a todos, y así empezaron a surgir nuevas historias y melodías, que después serían los temas de "Peso pluma". La urgente y eufórica "A los ojos, radiante", en la que reflexiono sobre nuestro extraño presente dejando un lugar para la esperanza y la resiliencia. La elegante y energética "El viaje de Lone Star", que es banda sonora de un trocito de vida estimulante durante una gira por los Estados Unidos.
La melancólica y sintética "En los suburbios", que se mueve en los territorios del desconcierto por no reconocer en su actitud a alguien a quien amas. La brillante y rítmica "Cisne negro", que nos reconcilia con lo que realmente somos frente a lo que creemos que creen los demás de nosotros mismos. La misteriosa, a veces asfixiante y finalmente luminosa "Azul plomo", en la que canta conmigo Víctor Cabezuelo de Rufus T. Firefly y que sobrevuela las emociones que vivimos al inicio del confinamiento duro de la pandemia.
La refrescante y disco-tropical "Diente de león", que pone en valor el amor y las segundas oportunidades. La perseverante y groovy "Séptimo asalto", que cedió su título al álbum y que insiste en la idea de lucha por nuestros sueños. La delicada y cool "La fuerza de mi gravedad", que cuenta con la preciosa voz del cantautor mexicano Pehuenche y que acaricia el sentimiento frágil del hundimiento y la depresión. Y la más experimental, rock y beatleiana "Velocidad de escape", que aboga por la amistad y la comunidad frente a la absorción de las personas tóxicas.
Reclutamos a Víctor Cabezuelo para los teclados, a Víctor Pescador para las guitarras y a Chema Moreno para los bajos, y también contamos con la ayuda de Manola y de Javier Cortés para algunos teclados adicionales y de Ana La Mujer Inversa, mi hijo Lucas Tresaco y María Tresaco para algunos coros. Ramiro, además de tocar todas las baterías y percusiones y de crear unos coros deliciosos, se encargó de las mezclas. Nunca antes Pecker había sonado así de grande, así de exquisito, de potente, brillante. Y acabó poniendo la guinda del mastering Jacobo Naya de La M.O.D.A. con su aterciopelado y poderoso punch.
Para la portada yo quería una fotografía. Durante la grabación en los Estudios Reno de Madrid quedé a cenar un día con mi amigo el artista Eduardo Nave. Esa noche surgió la idea. Quería una de sus obras como imagen del disco. Me envió más de 100 propuestas y me enamoré perdidamente de una, que había visto previamente en una exposición de su ya célebre libro "Like". Esa foto inquietante transmitía la ligereza que pretendí con el título, y quise que apareciera tal cual sin ningún tipo de manipulación.
Y esto es todo. Os dejo por aquí el videoclip de "El viaje de Lone Star". ¡No os lo perdáis!
Espero que con todo esto podáis estar al tanto de todo lo relacionado con la carrera de Pecker. No olvidéis seguirlo en sus redes sociales (Twitter, Facebook, Instagram, YouTube) para saber todo sobre él. No compartir el post para que así llegue a más gente y sígueme en mis redes sociales (Twitter, Facebook, Instagram, YouTube, GoodReads) para ver cuando traigo un nuevo post. ¡Hasta pronto!